Shimulia, Bangladesh – Cientos de miles de personas en Bangladesh tomaron trenes y coches para volver a trabajar el sábado después de que el gobierno anunciara la reapertura de los talleres de confección exportadores a pesar de la mortífera ola de coronavirus del país.

Ante los récords de casos y decesos diarios por Covid-19 registrados en este país, el gobierno decretó el cierre de oficinas, fábricas, transportes y tiendas del 23 de julio al 5 de agosto, pero excluyó de este confinamiento a las fábricas que suministran a las principales marcas de Europa y Norteamérica.

Alrededor de 4.500 talleres de confección del país, que emplean a cuatro millones de personas, podrán reabrir a partir del domingo, provocando un desfile de cientos de miles de obreros desde sus pueblos hacia los centros industriales.

Algunos optaron por hacerlo a pie a pesar del monzón que asola la zona. En el puerto de Shimulia, 70 kilómetros al sur de la capital Daca, decenas de miles de trabajadores esperaron durante horas para poder tomar un ferry.

“El ferry estaba a reventar”, decía Mohamad Masun, de 25 años, que dejó su pueblo al amanecer y anduvo más de 30 kilómetros antes de tomar un bicitaxi para llegar al embarcadero.

La industria textil se ha convertido en una piedra angular de la economía de Bangladesh y sus influyentes empresarios alertaron de consecuencias “catastróficas” si no podían entregar a tiempo las demandas de sus clientes extranjeros.

Con 169 millones de habitantes, Bangladesh es el segundo exportador textil después de China.